¿Cuál es el libro de la vida del cordero?

Cuando la Biblia hace referencia al “libro de la vida”, se refiere al libro que contiene los nombres de todos los que han puesto su fe en Jesucristo. Quienes deciden rechazar el regalo de la salvación no aparecen escritos en libro de la vida y serán juzgados por el justo juicio de Dios conforme a sus obras.

Y vi los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios. Los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida. Y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras

Apocalipsis 20:12.

Muchas personas deliberadamente rechazan a Jesús como el único Salvador del mundo, ignoran la vida eterna que existe después de la vida terrenal.

Todos los muertos grandes y pequeños estarán frente a Dios para ser juzgados.

Esto significa que después de esta vida llegará el día en que cada ser humano rinda cuentas ante el Todopoderoso. Nadie es tan importante para ser inmune de juicio, ni tan insignificante para que este juicio le sea impropio. Después de terminar los días de vida en la tierra, está programado un juicio para quienes con toda premeditación ignoren la palabra de Dios y rechacen a Cristo como el Salvador de sus vidas.

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Con cuánta razón Jesús, el Hacedor de maravillas, el Cordero de Dios, dijo a sus discípulos:

No os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos (Lucas 10:20).

Los discípulos se gozaban por haber obtenido la victoria sobre Satanás al ejercer su ministerio terrenal, pero mayor gozo y más grande victoria es que nuestros nombres estén escritos en libro de la vida.

Hoy su nombre puede estar en el registro del cielo al aceptar a Jesucristo en su corazón.

Usted puede asegurar una vida eterna de paz infinita. Jesús dijo:

De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna, y no vendrá a condenación, sino que ha pasado de muerte a vida (Juan 5:24).

El apóstol Pablo afirma que nuestra ciudadanía está en los cielos (Filipenses 3:20–21). Asegura que viviremos con Cristo en los cielos: Luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor (1ª Tesalonicenses 4:17).

Lamentablemente, los únicos que no podrán estar siempre con el Señor son aquellos cuyos nombres no aparecen en libro de la vida.

El juicio es en base a las obras de cada persona.

El juicio no es para hacer un balance entre obras buenas y malas. La palabra de Dios asegura que quienes creen en Cristo y viven conforme a sus mandamientos pasarán de muerte a vida (Juan 5:24), pero quienes rechazan a Jesús, al morir en su pecado, pasan a condenación y serán juzgados según sus obras para determinar el grado de castigo.

El que no se halló inscrito en el libro de la vida, fue lanzado al lago de fuego (Apocalipsis 20:15).

Aquellos cuyos nombres no están inscritos en el libro de la vida son los que no aceptaron el sacrificio de Jesucristo y rechazaron el amor de Dios, por eso su resultado será la perdición eterna. La Biblia dice:

El que tiene al Hijo tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida (1ª Juan 5:12).

Usted puede hoy mismo salvarse y librarse de la condenación eterna y determinar en esta vida donde pasará la eternidad:

Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados: unos para vida eterna, otros para vergüenza y confusión perpetua (Daniel 12:2).

Hoy es el día de salvación para usted ¡No rechace a Jesucristo! Es el único que le ofrece vida eterna. Es posible que viva muy cerca de la religión, pero a la vez muy lejos de Dios. Las buenas obras no salvan, sólo son buenas obras. Reciba a Jesucristo en su corazón.

El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que se niega a creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él (Juan 3:36).

No permita que pase más tiempo, no deje que transcurran las horas para tomar la decisión ¡Ríndale hoy su vida a Jesús! Él cambiará su corazón, transformará su vida y escribirá su nombre en el registro del cielo.

Recuerde la canción del Himnario de Gloria y Triunfo

Pecador ven al dulce Jesús

Y feliz para siempre serás;

Si en verdad le quisieres tener,

Al divino Señor hallarás.

Si enfermo te sientes morir,

Él será tu doctor celestial;

Y hallarás en su sangre también,

Medicina que cure tu mal.

Ven a él, ven al él

Que te espera tu buen Salvador…

EL LIBRO DE LA VIDA