¿Cuál es la enseñanza del libro de los Macabeos?
Los cuatro escritos de los libros de los macabeos, dan testimonio del judaísmo y de la vida judía anterior al nacimiento del cristianismo y del judaísmo rabínico, es la principal fuente de la historia de Israel a mediados del segundo siglo a.C.
Introducción general.
Mientras que cada uno de estos textos ilustran la vida judía y la historia anterior al nacimiento del cristianismo, también poseen un punto de vista distinto y dan testimonio de la naturaleza cambiante de la vida del judaísmo en la era del helenismo.
Primer y Segundo Macabeos describe el esfuerzo de los asmoneos en defender un tipo de vida judía tradicional en Palestina y al mismo tiempo reaccionan en contra de la llegada de instituciones y estilos de vida griegas.
Mientras que algunos de los temas en 3 Macabeos reflejan a 2 Macabeos, el texto se concentra en los judíos en Egipto bajo el gobierno de Tolomeo IV (221–204 a.C.)—medio siglo antes del gobierno asmoneo. Algunas fuentes se refieren a 3 Macabeos como “Ptolemaika”, que significa “cosas relacionadas con los tolomeos” (ej., Pseudo Atanasio).
El cuarto libro de Macabeos también difiere de 1 y 2 Macabeos en que no se dedica a relatar eventos históricos sino más que nada a discutir el tema filosófico sobre si “la razón religiosa gobierna sobre las emociones” (4 Mac 1:1a).
La posición de estos cuatro textos entre las comunidades judías y los cristianos ha sido diferente. La tradición Septuaginta griega transmite los cuatro; pero solo 1 y 2 Macabeos están incluidos en la Vulgata Latina, la lista de libros deuterocanónicos de la Iglesia Católica Romana, y los apócrifos protestantes; sin embargo, 3 y 4 Macabeos pudieron haber sido excluidos de la posición deuterocanónica/apócrifa porque no estaban en la Vulgata.
Las iglesias ortodoxas orientales incluyen 3 Macabeos en el canon. Ninguna comunidad religiosa incluye 4 Macabeos como parte del canon, pero el libro fue incluido en algunos manuscritos de la tradición Septuaginta.
Introducción histórica
El imperio persa dominó toda la región este del Mediterráneo aproximadamente durante dos siglos (mediados del siglo sexto a.C. hasta mediados del cuarto siglo a.C.), pero los griegos pudieron resistir el control persa.
En el 336 a.C. Alejandro el Grande se convirtió en rey de Macedonia y rápidamente se desplazó con su ejército a través del imperio persa, arrasándolo en menos de cuatro años. Algunas ciudades lucharon por su independencia mientras que otras le dieron la bienvenida.
Alejandro tomó control de Palestina en el 332 a.C. Josefo registra que Alejandro se postró ante el sumo sacerdote Jadúa antes de ofrecer sacrificio en el templo, pero quizás exageró o armó este relato (Ant. 11.8.4–5; Feldman se inclina más por aceptar la historicidad del relato, ver: Feldman, “Josephus”, 989).
Luego del asesinato de Darío III, gobernador del Imperio persa, en el 330 a.C., Alejandro se convirtió en el único gobernante de un gran imperio en crecimiento. Sin embargo, Alejandro murió en el 323 a.C. sin dejar herederos. Sus sucesores (El Diádoco) lucharon unos contra otros por el control del impero durante los siguientes 40 años.
Antígono, Lisímaco, Tolomeo y Seleuco lucharon unos contra otros por el poder. Luego de la muerte de Antígono, en la batalla de Ipso en el 301–302 a.C., los tres restantes se dividieron el territorio:
Lisímaco en Tracia y Asia Menor; Tolomeo en Egipto y Coele-Syria; y Seleuco el norte de Siria y Babilonia. Continuaron luchando por Palestina debido a su ubicación, rutas comerciales importantes y carreteras militares.
En 281 a.C., cuando Seleuco derrotó a Lisímaco y se convirtió en el gobernante de Asia Menor, Tolomeo y Seleuco se convirtieron en los únicos sucesores que quedaban. Dieron origen a dos reinos rivales que tuvieron un enorme efecto en la vida en Palestina durante un siglo hasta el período asmoneo (167–63 a.C.).
Dan 11 describe la lucha de los dos reinos sobre Palestina. Palestina permaneció bajo el control de Tolomeo durante un siglo. Fue un tiempo de paz relativa para los judíos en Palestina, a pesar de que los dos reinos pelearon muchas batallas comenzando en el 219 a.C.
Antíoco III buscó controlar Palestina, pero fue derrotado por Tolomeo IV (Philopater) en la batalla de Rafia en junio del 217 a.C.
El tercer libro de Macabeos comienza con un relato de cómo un judío intervino y frustró el complot destinado a matar a Tolomeo IV en el camino hacia la batalla de Rafia.
A pesar de la resistencia de Tolomeo, Antíoco y los Seléucidas al final tomaron control de Palestina, gobernando desde el 198–167 a.C. La batalla final se llevó a cabo en el Panión al norte de Palestina en 198 a.C. Palestina quedaría bajo control Seléucida hasta la revuelta macabea.
Los judíos dieron la bienvenida a Antíoco III, quien les permitió tener el derecho de “vivir de acuerdo a su constitución ancestral”—la ley Mosaica (Josefo, Ant. 12). La frase “concesiones de la realeza a los judíos” (2 Mac 4:11; τοῖς Ιουδαίοις φιλάνθρωπα βασιλικὰ, tois Ioudaiois philanthrōpa basilika) se refiere al acto de Antíoco III donde les garantiza a los judíos el derecho de vivir de acuerdo a la Ley.
Aunque las perspectivas para los judíos parecían alentadoras, la situación se deterioró rápidamente y continuó empeorando luego del 190 a.C. En el oeste, Roma continuaba creciendo y se expandía hacia el este.
En el 190 a.C., los romanos derrotaron a Antíoco en la batalla de Magnesia y pusieron a los seléucidas bajo un castigo financiero severo. El incidente de Heliodoro de 2 Mac 3 (también mencionado brevemente en Dan 11:20) probablemente representa un resultado de dicha presión de parte de los romanos.
Antíoco III finalmente fue asesinado. Lo sucedió su hijo Seleuco IV, quien poco después fue sucedido por Antíoco Epífanes en el 175 a.C.
LOS LIBROS DE LOS MACABEOS
JUDAS MACABEO (Gr. Ioúdas Makkabaíos)
El líder militar y político a quien se le atribuye el éxito de la revuelta judía contra la dominación seléucida durante el reinado de Antíoco IV Epífanes.
Él aparece en 1 Macabeos 2:4 como el tercero de cinco hijos de Matatías, un sacerdote de la orden de Joiarib; Josefo hace la afirmación menos probable de que es el hijo mayor.
Si bien Makkabaios parece ser un apodo en 1 Macabeos 2:4 y en otros lugares, se hace referencia a él como Ioudas Makkabaios («Judas Macabeo») en 2:66; 5:24.
En 1 Macabeos 5:34 y en gran parte de 2 Macabeos él simplemente es llamado Macabeo. La mayoría de los eruditos encuentran el origen del nombre en Aram.
maqqaḇaʾ o Heb. maqqeḇeṯ, «martillo.» Hay mucha especulación sobre si esto se refiere a una característica física como la forma de su cabeza. Por extensión, el término «macabeo» se utiliza a veces para referirse a Judas y sus hermanos, a pesar de que la dinastía de la familia resultante se conoce como asmonea en la literatura rabínica, Josefo, y en otros lugares.
Modein, al noroeste de Jerusalén fue muy probablemente su hogar ancestral (1 Mac 2:70; 9:19). Mientras 1 Macabeos, la historia «oficial» de la dinastía asmonea, y Josefo atribuyen a Matatías el origen de la revuelta, 2 Macabeos glorifica el papel de Judas Macabeo como el héroe de estos eventos y no hace ninguna mención de su padre.
Esto ha llevado a algunos historiadores a cuestionar la importancia del papel de Matatías en estos desarrollos. Los dos relatos comparten un esquema similar del curso de las batallas que llevaron a la expulsión de las fuerzas griegas del templo de Jerusalén en 164 a.C.
En el relato de 1 Macabeos Judas toma control del grupo incipiente de revolucionarios que había sido reunido por su padre, incluyendo sus cuatro hermanos que aceptan su liderazgo (1 Mac 2:65–68; 3:1–2).
Según 2 Macabeos 8:1 Judas secretamente reclutó un ejército de 6000 de las aldeas de la región montañosa al occidente de Jerusalén para resistir la opresión y la persecución experimentada por los judíos bajo Antíoco IV.
En 1 Macabeos 3 esta resistencia inicia con la derrota de Apolonio y Serón, comandantes de las fuerzas griegas. La enérgica respuesta seléucida es liderada por Gorgias y Nicanor. Utilizando un ataque por sorpresa en Emaús, Judas derrota estas fuerzas y los sobrevivientes huyeron, probablemente en la primavera de 165.
Las fuentes coinciden que Judas dirigió un creciente ejército (1 Mac 4:29) que para el otoño había asegurado la zona del templo y otras partes de Jerusalén. Los sacrificios fueron ofrecidos en el nuevo altar limpiado en 25 Chisleu, 148 de la era seléucida (c. 14 de dicembre 164). Este acontecimiento se conmemora anualmente en la fiesta judía de Hanukkah.
Los textos sugieren resistencia gentil a este resurgimiento judío de poder. Judas y sus hermanos defendieron a judíos sitiados en Idumea al sur, al otro lado del Jordán en Galaad, y en Galilea.
En la primavera de 163 Judas infructuosamente atacó el Akra, la fortaleza de la guarnición seléucida y refugio de las fuerzas antiasmoneas en Jerusalén. Después de una serie de batallas Judas Macabeo fue asesinado en Elasa en 160.
En medio de la descripción de las campañas militares de Judas, 1 Macabeos 8 registra una delegación exitosa enviada a Roma con el fin de formar una alianza contra los seléucidas.
Los éxitos políticos y militares de Judas son en gran parte responsables de iniciar el período de gobierno asmoneo que comenzó con su hermano Jonatán unos años más tarde y se prolongó hasta la conquista romana en el año 63 a.C. Pero esta familia de Judea sólo pudo llegar al poder después de que se había recuperado de las derrotas que resultaron en la muerte de Judas. El templo, sin embargo, permaneció en manos de los sacerdotes judíos de la época de su nueva dedicación.
1 Macabeos
Esquema y contenido.
El primer libro de Macabeos contiene tres principales secciones discernibles:
- (1 Mac 1:1–2:70)—Aumento de la helenización; Matatías y la respuesta del remanente
- (1 Mac 3:1–9:22)—Los hechos de Judas, el hijo de Matatías
- (1 Mac 9:23–16:24)—Las proezas de Jonatán y Simón; surgimiento de Juan Hircano
Parte 1.
El libro comienza presentando a Alejandro el Grande y su reino dividido, así como su “raíz de pecado”—Antíoco IV Epífanes (1 Mac 1:1–10; ver Isa 11:10 y Dan 11:7). El narrador presenta entonces a los “anárquicos”, o “rebeldes” (NBJ)—Judíos que aceptaron las formas del helenismo y se adaptaron a costumbres griegas contrarias a la ley (1 Mac 1:11–15). Por ejemplo, estas personas construyeron un gimnasio y practicaban epispasm (un procedimiento quirúrgico para sacar “las marcas de la circuncisión“; 1 Mac 1:15) a fin de poder participar en las nuevas instituciones (ver 1 Cor 7:18). El narrador entonces detalla la invasión de Antíoco IV a Egipto y a Palestina (1 Mac 1:16–61) y describe cómo profanó el templo en Jerusalén y comenzó una persecución religiosa.
El primer capítulo de 1 Macabeos termina con la descripción de los que permanecen fieles, incluyendo los mártires (1:62–64).
El capítulo dos comienza con la descripción del levantamiento de Matatías (1 Mac 2:1–48). 1 Mac 2:39–41 constituye el primer ejemplo de justificación de la profanación del sabat para la guerra.
El narrador menciona brevemente un grupo de los “asideos” que se unieron a la revuelta por un tiempo (1 Mac 2:42; ver también 1 Mac 7:12–13). El segundo capítulo termina con el discurso de despedida de Matatías a sus cinco hijos, en el cual los anima a “mostrar celo por la ley, y dar sus vidas por la alianza de nuestros padres” (1 Mac 2:50; comparar el discurso de Jacob y muerte en Gén 49–50).
Parte 2.
A partir del capítulo tres, Judas, quien es llamado Macabeo, toma el mando de la revolución en lugar de su padre. Luego de un poema corto que detalla los hechos de Judas (1 Mac 3:3–9), el narrador relata la derrota de Apolonio, posiblemente el gobernador de Samaria (Josefo, Ant. 12.5.5; 7.1).
Judas continúa obteniendo victorias (1 Mac 3:10–4:35). En 1 Mac 4:36–61, el narrador relata la Re consagración del templo tres años después que Antíoco IV lo profanara (1 Mac 1:54). La fiesta judía de Janucá celebra esta Re consagración.
El capítulo cinco narra la mayor expansión de los asmoneos hacia los alrededores con el fin de rescatar a los judíos oprimidos. En el capítulo seis, el narrador comienza a resaltar algunos de los juegos políticos comunes entre los rivales aspirantes a la corona de la región.
Luego de escuchar acerca de las victorias de Judas y la Re consagración, Antíoco comienza a desesperarse y muere finalmente (1 Mac 6:16). Judas entonces ataca la ciudadela y una fortaleza seléusida, y se lleva a cabo una segunda batalla en Bet Sur (1 Mac 6:18–54; comparar 1 Mac 4:29–34). La narración continúa con una paz temporal entre los judíos, Lisías y Antíoco V, quien restablece la autonomía religiosa de los judíos (1 Mac 6:59). Demetrio I se convierte en rey al comienzo del capítulo siete, y Alcimo se convierte en sumo sacerdote.
Durante siete años después de la muerte de Alcimo en el 159 a.C., no se conoce de ningún sumo sacerdote que haya servido en el templo de Jerusalén. Este período, conocido como el intersacerdotium, finalizó cuando Jonatán tomó el cargo. Alcimo, a diferencia de los asmoneos que tomaron el sumo sacerdocio, reclamó tener estatus legítimo de sumo sacerdote. Sin embargo, Alcimo recibe una crítica bastante negativa de parte del autor dado que políticamente era pro seléucida. Es mucho más difícil determinar quién era culturalmente pro seléucida desde las fuentes disponibles.
La última y más notoria batalla de Judas, la derrota de Nicanor, está registrada en 1 Mac 7:26–50.
El capítulo ocho hace un resumen de los éxitos de Roma y de la alianza que los judíos buscaron con Roma por su poder sobre los seléucidas. Al enterarse de la derrota de Nicanor, Demetrio envió fuerzas para atacar a Judas, quien murió durante la batalla. (1 Mac 9:1–22; comparar 9:22 con 1 Rey 11:41).
Antes de que Jonatán se convirtiera en líder, el autor menciona un tiempo inquietante debido a la anarquía y a una gran hambruna que causó que el “país” [la gente] se pasara “del lado de ellos” (1 Mac 9:24). El autor pudo haber inventado la hambruna para poder explicar por qué muchos abandonaron la causa; alternativamente, la palabra hebrea traducido al griego puede haber producido un error.
Pastor sostiene que la hambruna en efecto ocurrió, y que duró dos años.
Parte 3.
1 Mac 9:23–31 marca el comienzo del liderazgo de Jonatán. Desde 1 Mac 9:32–11:74, el autor mantiene un equilibrio entre la narración de las proezas de Jonatán con los permanentes juegos de poder entre los líderes políticos. Jonatán pareciera haber usado a estos líderes en forma diplomática poniendo uno en contra de otro para obtener concesiones para los judíos y recibir él mismo el alto cargo sacerdotal (1 Mac 10:15–21; 11:57–59). En el capítulo 12, el autor detalla la reafirmación de la alianza con Roma y los espartanos, ahora con Jonatán (1 Mac 12:1–23). El capítulo 12 finaliza con Trifón, quien aspira convertirse en rey, capturando a Jonatán (1 Mac 12:24–53).
El capítulo 13 se centra en Simón, el nuevo líder. Luego del asesinato de Jonatán (1 Mac 13:23), el autor narra cómo Simón logra la independencia de Judea. Declaró que Judea era libre del tributo obligatorio, tomó control de la ciudadela, ganó el derecho de acuñar monedas, y adoptó un nuevo sistema calendario que no se basaba en la regla seléucida.
Luego de describir la renovación de la alianza de Simón con Roma y los espartanos, el narrador describe las tablillas de bronce (ver también 1 Mac 8:22) que contienen el registro de las proezas de Simón (1 Mac 14:25–49). Describe a la gente como solidaria y señala que ellos eligen a Simón como el sumo sacerdote, comandante militar, y etnarca. El final del capítulo 16 narra el asesinato de Simón y el ascenso de Juan Hircano en su lugar. El reconocimiento de Roma de su alianza con los judíos en 1 Mac 15:10–24 quizás pertenece justo después de 1 Mac 14:24.
Fecha.
El autor de 1 Macabeos probablemente habrá escrito después de la ascensión de Juan Hircano, el último suceso descripto en el capítulo 16 (134 a.C.). El autor también respeta a los romanos (ej., 1 Mac 8:1–16), lo que indica que probablemente escribió antes de la conquista romana de Palestina y Jerusalén cuando Pompeyo entró en el lugar santísimo en el 63 a.C.
Probablemente el autor escribió después de la muerte de Juan Hircano, ya que el libro termina con una conclusión predecible alusiva a los libros de Samuel y de Reyes donde el líder ya había muerto.
Tedesche y Zeitlin ubican los primeros 13 capítulos al comienzo del reinado de Hircano, y ven a los tres últimos como parte de otro libro agregado posteriormente. Goldstein da como fecha para la composición el 90 a.C. durante el reino de Alejandro Janneo, pero esto podría ser demasiado tarde. Lo más probable es que haya sido escrito antes que eso, al final del reino de Hircano (o cerca del final), en el cambio de siglo.
Temas.
El primer libro de Macabeos sirve como un segmento de propaganda para la dinastía asmonea; el narrador continuamente glorifica y justifica la actuación de sus primeros fundadores. Esta perspectiva es lo que tan drásticamente separa 1 y 2 Macabeos.
El autor ve a los gobernantes asmoneos como herederos justos de la continuación de la historia sagrada de Israel; Dios obró a través de su gente en el pasado, y ahora trajo justicia a su pueblo a través de la familia de los asmoneos. El hecho de que el autor escribió este trabajo en respuesta a un sentimiento anti asmoneo o en un momento de aprobación generalizada, genera debate en cuanto a la fecha de la obra.
Por ejemplo, Goldstein aboga por una fecha posterior porque piensa que el autor escribió en respuesta a un fervor anti asmoneo; sin embargo, el autor pudo haber escrito en un momento después de Hircano, cuando la gente podía reflexionar acerca de cómo es que llegaron a la situación donde estaban. El narrador nunca menciona a Dios por su nombre, aunque se dice que es un promotor de los asmoneos. En su lugar, el autor utiliza el circunloquio “cielos” o el pronombre personal.
El autor, sin embargo, coloca consistentemente a los asmoneos en el papel principal. Dios solo actúa como un simpatizante y Señor del pacto con Israel. El Dios obrando a través de milagros—tan común en la Biblia hebrea—está ausente en 1 Macabeos.
Teológicamente, el autor de 1 Macabeos presenta un conservadorismo bíblico estricto, excepto en su apoyo a la lucha durante el sabat. Además, dado que los Macabeos vienen de la línea de la familia de Joarib, faltaría una explicación por la cual ellos tomaron el sumo sacerdocio. Sin embargo, el autor resalta los temas de liberación de los poderes extranjeros, santificación del templo y la recuperación de tierras, todo lo cual sirvió como la base del apoyo asmoneo.
Forma literaria e historia de los textos.
El formato literario es principalmente una historia narrativa en un marco cronológico. Muchos discursos, tratados, piezas poéticas y canciones están intercalados en el flujo narrativo. Las dos primeras de tres secciones de 1 Macabeos presentan una estructura de quiasmo, el que parece agregar arte literario a la ambiciosa historiografía:
- A: (1 Mac 1:1–10)—Alejandro el grande muere; Antíoco IV es presentado
- B: (1 Mac 1:11–15)—Los judíos renegados buscan unirse a los gentiles
- C: (1 Mac 1:16–64)—El templo es profanado por los griegos
- D: (1 Mac 2:1–70)—Matatías insta a sus hijos a rebelarse
- E: (1 Mac 3:1–26)—Judas conduce la revuelta de los judíos
- D’: (1 Mac 3:27–4:35)—Antíoco IV procura sofocar la revuelta de los judíos
- C’: (1 Mac 4:36–61)—El templo es liberado y consagrado nuevamente por los judíos
- B’: (1 Mac 5:1–68)—Los judíos justos derrotan a los gentiles que los rodeaban
- A’: (1 Mac 6:1–17)—Antíoco IV muere
- A: (1 Mac 6:18–7:50)—Los judíos obtienen libertad religiosa
- B: (1 Mac 8:1–32)—Los judíos hacen un pacto con Roma
- C: (1 Mac 9:1–10:66)—Jonatán sube al poder
- C’: (1 Mac 10:67–11:74)—Jonatán mantiene su posición de poder
- B’: (1 Mac 12:1–23)—Los judíos renuevan su pacto con Roma
- A’: (1 Mac 12:24–14:15)—Simón libera la ciudadela y obtiene la independencia.
Todos los testigos restantes de nuestro texto provienen de la traducción al griego del original hebreo del cual no tenemos testimonios. Sin embargo, Josefo, al escribir su Antigüedades de los Judíos, tuvo acceso a un texto hebreo de 1 Macabeo; tanto Orígenes como Jerónimo sabían de la versión hebrea.
El texto crítico estándar de mayor importancia es Kappler, Maccabaeorum Liber I (segunda edición, 1967). La tradición de la Septuaginta sirve como una fuente principal para una historia de los textos del libro.
Los Códices Sinaítico, Alejandrino y Veneto contienen 1 Macabeos. Las primeras traducciones del griego al latín, al siríaco y al armenio ayudan como valiosos testimonios en el trabajo de crítica de los textos. Algunos antiguos manuscritos latinos se han presentado como existentes antes del trabajo de Lucian (tercer siglo), quien entregó el texto agregando muchos de sus propios cambios; estos manuscritos latinos son muy valiosos.
2 Macabeos
Esquema y contenido.
El segundo libro de Macabeos cubre una parte del período histórico que había detallado 1 Macabeos. Relata la reforma helenística (2 Mac 3–4), la persecución religiosa y la revuelta macabea. Sin embargo, termina su cobertura con la derrota de Nicanor (2 Mac 15) antes de la muerte de Judas. La obra es un resumen de una obra mucho más grande de cinco volúmenes de Jasón de Cirene (ahora extraviado). El libro consiste en cuatro secciones:
- (2 Mac 1:1–2:18)—Dos cartas con encabezamiento
- (2 Mac 2:19–32)—Prólogo
- (2 Mac 3:1–15:36)—Historia
- (2 Mac 15:37–39)—Epílogo
El libro comienza con dos cartas como encabezamiento, que fueron enviadas a los judíos en Egipto, invitándolos a celebrar el Janucá.
La primera (2 Mac 1:1–9) es en realidad una continuación de una carta extraviada. La segunda carta coincide en la opinión general del epitomator, pero disiente en cuestiones históricas. La segunda carta afirma ser del propio Judas y muchas veces ha sido rechazada como no genuina; sin embargo, Wacholder sostiene que es auténtica y es por lo tanto el único escrito existente de Judas.
Al igual que las historias griegas y romanas de la época, el narrador presenta la obra mostrando algunos momentos especiales y estableciendo parámetros. Esto también sirve para atraer a los lectores a seguir leyendo.
El tercer capítulo comienza la historia en 2 Macabeos, empezando por el incidente con Heliodoro (2 Mac 3:1–4:6; comparar 4 Mac 4:1–14). La narración comienza a exponer más contraste con 1 Macabeos cuando Heliodoro, intentando entrar al lugar sagrado es postrado por intervención divina (2 Mac 3:22–28).
El capítulo 4 aporta información sobre la lucha de diversos aspirantes a obtener el sumo sacerdocio, así como la reforma helenística (comparar 1 Mac 1; 4 Mac 4:15–26). Capítulo cinco detalla la profanación del templo por Antíoco IV (ver Dan 11; 1 Mac 1). Capítulo seis narra la primera persecución contra los judíos (2 Mac 6:1–6).
2 Mac 6:7–7:42 narra una serie de martirios (Eleazar, una madre y sus siete hijos) cuando se niegan a volverse en contra del Dios de Israel.
Judas Macabeo entra en acción en el capítulo ocho cuando comienza la revuelta; el narrador detalla las primeras victorias (comparar 1 Mac 3). En el capítulo nueve, Antíoco—quien estaba buscando vengarse de las recientes derrotas—es golpeado por el Señor y se arrepiente antes de morir (2 Mac 9:5; comparar 1 Mac 4 y 6;).
Al comienzo del capítulo 10, los rebeldes recuperan el templo y lo vuelven a dedicar; más tarde Antíoco V les garantiza el derecho de vivir bajo su constitución ancestral (ver 2 Mac 11:24–25).
Luego de narrar algunas de las proezas de Judas, el narrador relata los juegos políticos entre Demetrio I y Antíoco V (capítulo 14). El libro culmina con la derrota de Nicanor y la preservación del templo (comparar 1 Mac 7).
Fecha.
La obra original de cinco volúmenes de Jasón de Cirene pudo haber sido escrita después del 161 a.C. (la victoria sobre Nicanor) y pudo haber sido compuesta alrededor del tiempo de la muerte de Judas. Goldstein, sin embargo, coloca la obra de Jasón en el 85 a.C.
Así como 1 Macabeos, 2 Macabeos presenta una opinión positiva de los romanos, lo cual sugiere que fue escrita antes del 63 a.C.). Zeitlin sostiene que la declaración en 2 Mac 15:37 de que “la ciudad ha estado en posesión de los hebreos desde ese momento” lo cual demuestra que Jerusalén era la capital de Judea cuando se escribió el libro. Señala que podría ser el tiempo de Herodes (38–34 a.C.) o de Agripa I (41–44 d.C.) y se inclina por el tiempo de Agripa.
Temas.
Mientras 2 Macabeos cubre acontecimientos históricos que también están en 1 Macabeos, difieren en la perspectiva. Comparado con 1 Macabeos, emergen rápidamente cuatro características en contraste:
- La cosmovisión histórica deuteronomista de 2 Macabeos;
- Las casi constantes conexiones con la historia del templo y su destino (de ahí el título del libro de Doran, Temple propaganda);
- El restar importancia a la familia de los asmoneos (solo se menciona frecuentemente a Judas);
- La acción de Dios en el drama.
Nickelsburg argumentó que el escritor trabajó con el punto de vista deuteronomista en el relato histórico rígido.
La parte histórica del libro (2 Mac 3:1–15:36) consiste en cinco niveles básicos del esquema deuteronomista—bendición, pecado, castigo, momento decisivo (o dicho bíblicamente, arrepentimiento) y juicio/salvación. El esquema de Nickelsburg de la sección es la siguiente:
- Bendición: Dios castigó un ataque al templo durante el sacerdocio piadoso de Onías (2 Mac 3:1–40)
- Pecado: la helenización de Jerusalén y el saqueo del templo bajo Jasón y Menelao (2 Mac 4:1–5:10)
- Castigo: Las represalias de Antíoco, incluyendo la profanación del templo (2 Mac 5:11–6:17)
- Momento decisivo: la muerte de los mártires y las plegarias del pueblo (2 Mac 6:18–8:4)
- Juicio y salvación (2 Mac 8:5–15:36)
- Las victorias iniciales de Judas (2 Mac 8:5–36)
- La muerte de Antíoco (2 Mac 9:1–29)
- La purificación del templo (2 Mac 10:1–9)
- Más victorias de Judas (2 Mac 10:10–13:26)
- La intriga de Alcimo; Judas sofoca el ataque de Nicanor al templo (2 Mac 14:1–15:36)
Surgen dos asuntos teológicos importantes en 2 Macabeos:
- Creatio ex nihilo (creación desde la nada) en 2 Mac 7:28.
- La resurrección de los muertos en el capítulo siete.
La Biblia hebrea nunca desarrolla explícitamente una teología de la resurrección. 2 Mac 7, sin embargo, manifiesta explícitamente una doctrina de la resurrección. La doctrina de la resurrección en 2 Macabeos también da origen a la práctica de orar por los muertos cuando Judas se encuentra con sus soldados caídos quienes iban cargando ídolos. El autor interpreta la oración por los muertos como justificada por la esperanza de la resurrección (2 Mac 12:43b-45).
Forma literaria e historia de los textos.
El narrador confeccionó su obra en el estilo de una “historia emotiva”, siguiendo el estilo literario griego de narración dramática donde el autor busca no solo contar los acontecimientos, sino también evocar los sentimientos de los lectores u oyentes. El autor tiene éxito en esto a través de una representación viva de personas y acontecimientos, lenguaje sensacionalista, retórica, y convocando a Dios como un actor en medio de muchos sucesos. Aunque la obra es exagerada en algunos puntos, sigue siendo una importante fuente para la historia de la revuelta Macabea y el momento anterior a la revuelta, que se registra con más detalles que en 1 Macabeos.
La obra de Jasón de Cirene y 2 Macabeos fueron compuestas en griego, a diferencia de 1 Macabeos, traducida al griego. Los testigos textuales más importantes para 2 Macabeos son los primeros manuscritos disponibles y las primeras traducciones del griego al latín, al siríaco y al armenio.
El segundo Macabeos está en el Códice Alejandrino (siglo quinto) y en el Códice Veneto (siglo ocho). El símbolo para otro grupo importante de textos más pequeños es q; estos están libres de la influencia luciánica.
El texto crítico estándar para 2 Macabeos es la tercera edición de Hanhart de Maccabaeorum Liber II en las series septuaginta Göttingen (2008).
3 Macabeos
Esquema y contenido.
El autor de 3 Macabeos escribió una obra notablemente diferente a 1 y 2 Macabeos; sin embargo, el libro contiene muchos de los mismos temas de 2 Macabeos; por momentos también contiene una secuencia exacta del argumento.
El autor resalta el cuidado y la protección de Dios para su pueblo, así como una actitud indecisa hacia los gentiles. El contenido de 3 Macabeos, sin embargo, no incluye ninguna historia de la revuelta de los Macabeos ni de los Macabeos en sí. Fue probablemente reunido junto a los primeros dos libros porque los temas son similares a los de 2 Macabeos.
- (3 Mac 1:1–7)—La batalla de Rafia
- (3 Mac 1:8–2:24)—El intento de Tolomeo de entrar al templo, y su castigo
- (3 Mac 2:20–33)—Tolomeo comienza a perseguir a los judíos de Egipto
- (3 Mac 3:1–4:21)—Tolomeo intenta matar a los judíos
- (3 Mac 5:1–6:21)—Se frustra la ejecución de los judíos
- (3 Mac 6:22–7:23)—Tolomeo favorece a los judíos
El primer capítulo comienza con la batalla de Rafia, describiendo como un judío le salva la vida a Tolomeo (Polibio 5). El resto del capítulo 1 (3 Mac 1:8–29) trata sobre el intento de Tolomeo de entrar en el templo, y la reacción judía ante esto.
El capítulo dos comienza con Simón, el sumo sacerdote en oración a Dios, quien responde. A través de una intervención milagrosa, Tolomeo es desbaratado y regresa a Egipto jurándole desgracia a la comunidad judía de allí (3 Mac 2:25–33; evoca a Antíoco IV en 1 y 2 Macabeos). Cuando Tolomeo da un ultimátum a los judíos requiriéndoles que cometan apostasía, el narrador describe que la mayoría resistieron a la tentación de tener una buena relación con el rey y con la ciudadanía alejandrina (3 Mac 2:31–33), lo cual enfureció a Tolomeo.
3 Mac 3 y 4 Analiza el intento de Tolomeo de reunir a todos los judíos de Egipto, menos los apóstatas, en un hipódromo para matarlos. En el capítulo cinco, Tolomeo instruye a Hermón, el cuidador de los elefantes, a drogarlos y soltarlos sobre los judíos. Los elefantes se volvieron comunes en los ejércitos helenistas luego de la invasión de Alejandro a la India. Sin embargo, el autor exageró el número aquí, ya que Polibio afirma que Tolomeo solo tenía 73 elefantes en la batalla de Rafia (comparar 1 Mac 6:34). La intervención divina frustra los planes del rey continuamente, en el capítulo seis, los elefantes en realidad se fueron en contra de los soldados de Tolomeo. Tolomeo finalmente cambia sus planes y comienza a favorecer a los judíos (3 Mac 6:22–7:9) y aún les da la autoridad de matar a los judíos que habían apostatado (3 Mac 7:10–23).
Fecha.
Tercer Macabeos probablemente fue compuesto entre el 217 a.C. (batalla de Rafia) y el 70 d.C. (el templo destruido por los romanos). Los comentarios del autor indican que ve al templo como todavía en pie. Las alusiones que se encuentran en el capítulo seis sobre la traducción al griego del libro de Daniel, también hacen que la fecha se traslade un poco más tarde.
El autor menciona a Dios cuando salva a los tres hombres del horno ardiente, pero con un detalle que solo se encuentra en la traducción griega, no en el original hebreo.
La traducción de Daniel data alrededor del 100 a.C., por lo tanto 3 Macabeos debió haber sido escrito después del 100 a.C.
La obra habrá sido compuesta seguramente a fines del período de Tolomeo, no mucho después del 100 a.C., y antes de la conquista romana del 30 a.C.
Los que ponen como fecha del libro en el período romano, hacen hincapié en la palabra λαογραφία (laographia); la evidencia en esta etapa no está ni cerca de ser definitiva en esta cuestión.
Temas.
Los temas más importantes para el autor de 3 Macabeos son la lealtad a un Dios y a su Torá, que Dios protege a su pueblo aún en la diáspora y que las acciones y la retórica anti judías no tienen justificación.
Forma literaria e historia de los textos.
3 Macabeos se encuentra en el Códice Alejandrino (siglo quinto) y en el Códice Veneto (siglo octavo), en diversos manuscritos importantes más pequeños, en una traducción siríaca y en una traducción parafraseada en armenio. El texto crítico estándar es el de Hanhart, Maccabaeorum Libri III, también en las series Göttingen Septuaginta (1980).
La obra misma tiene muchos aspectos de la historia “emotiva” (del término griego πάθος, pathos, que significa que el autor escribió de una manera que provocaba emoción) como lo hace 2 Macabeos. Sin embargo, la intención principal del autor no fue dar un recuento histórico de acontecimientos reales.
Esto se demuestra en la manera en la que el autor estructuró la narración en paralelo con 2 Mac 3:1–10:9, y los crasos errores históricos a lo largo del texto (ej., la escena con los elefantes ocurrió bajo Tolomeo VIII, quien reinó en la segunda mitad del segundo siglo a.C.; ver Josefo, Ag. Ap., 2.50–55).
Johnson ha sostenido recientemente que el libro debería ser considerado inequívocamente como una ficción histórica, una pieza ficcional con mucha historia real entremezclada (Historical Fictions).
4 Macabeos
Esquema y contenido.
Cuarto Macabeos difiere en gran manera de los otros en cuanto a que no intenta relatar una historia narrativa, sino que se dedica a un tema filosófico (4 Mac 1:1). Utiliza la historia narrativa solamente con fines didácticos. Esto, junto a fuentes con Filón de Alejandría, iSabiduría de Salomón y Aristóbulo (del que sólo quedan 5 fragmentos, preservados en Eusebio), constituye nuestro conocimiento de los filósofos judíos helenistas.
El libro consiste en dos secciones principales:
- (4 Mac 1:1–3:18)—Presenta la tesis de que la razón filosófica prevalece sobre las emociones y que la razón está mejor conectada con la vida si se la vive en armonía con la Ley.
- (4 Mac 3:19–18:24)—Dramatiza la tesis a través de la narración de la persecución de Eleazar, la madre, y los siete hijos, basada en el relato más corto de 2 Mac 6–7. Los tres episodios están estrechamente relacionados, pero cada uno tiene características distintivas (Eleazar, 4 Mac 5–7; los siete hijos, 4 Mac 8:1–14:10; la madre, 4 Mac 14:11–17:6).
Fecha.
De los cuatro libros, 4 Macabeos es al que se le puede asignar una fecha con más facilidad. Es muy posible que el autor haya usado 2 Macabeos directamente como una fuente.
Bickerman sostuvo que se decía que Apolonio era el gobernador de “Siria, Fenicia y Cilicia”, en 4:2 (comparar 2 Mac 3:5). Estos tres juntos bajo una unidad administrativa que solo ocurrió bajo el gobierno romano, aproximadamente desde el 19–72 d.C. Por lo tanto, la obra debería haber sido compuesta alrededor de la mitad del primer siglo.
Temas.
El comienzo del libro establece su tema principal: “la razón prevalece sobre las emociones”. El libro también hace hincapié en que el obedecer la ley provee de los mejores medios para dominar las emociones. El libro enfatiza la veneración de los patriarcas (4 Mac 1:30–3:18), la obediencia a la ley, y la soberanía de Dios. Interpreta los martirios como el momento decisivo real en la lucha contra los poderes extranjeros.
Los mártires justos proveen la expiación de los pecados de la comunidad (la helenización), lo cual hace un paralelo con la muerte expiatoria de Jesús en el cristianismo (4 Mac 17:19–23; ver 4 Mac 4:19–21; comparar Rom 3:25; Heb 2:17; 1 Jn 4:10).
El autor considera el vivir de acuerdo con la ley como la completa satisfacción de los más altos ideales de la filosofía helenista. Demuestra que está familiarizado con las clásicas cuatro virtudes cardinales (posteriormente adoptadas por el cristianismo, al escribir, “si, pues, es evidente que la razón domina sobre aquellas emociones adversas a la templanza, en particular, la glotonería y la lujuria, es también claro que domina las pasiones adversas a la justicia, tales como la malevolencia, y aquellas que obstaculizan a la valentía, específicamente la cólera, el temor y el dolor”, (1:2–4 énfasis agregado) y más tarde “ahora los tipos de sabiduría son la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza”. En 4 Mac 1:16, el autor muestra su conocimiento de la definición de “sabiduría” asociada con Posidonio.
Forma literaria e historia de los textos.
Los temas de 4 Macabeos demuestran que el autor está familiarizado con la vida judía tradicional, así como con la filosofía grecorromana. La forma del libro es de carácter retórico. Sin embargo, también afirma ser un tratado moral/filosófico. Sirve como un ejemplo de reinterpretación de la fe y la religión judía dentro de un marco y una retórica helenistas.
El autor tenía dominio sobre la filosofía platónica y estoica, y muestra más puntos de contacto con ambas de lo que muestra Sabiduría de Salomón. Indica a que género literario pertenece el libro con la tercera palabra de 4 Mac 1:1: ἐπιδείκνυσθαι (epideiknysthai). Existen tres tipos de oratoria en el período:
- epidéitica, o demostrativa (oratoria revelada, o el elogio y la culpa)
- deliberativo (político)
- forense (judicial, acerca de casos legales)
El trabajo también muestra similitudes con oratorias funerarias primitivas y discursos conmemorativos (ej., Tucídides, Peloponnesian War, 2.43–44; Dio Chrysostom, Melancomas 21).
Los Códice Sinaítico y Alejandrino incluyen ambos a 4 Macabeos (siglos cuarto y quinto). El Códice Veneto también lo incluía, pero no incluyen 4 Mac 5:11–12:1. Desde el siglo cuarto, la gente atribuía equivocadamente la obra a Josefo; por lo tanto, numerosos manuscritos de sus obras también contienen 4 Macabeos. El libro fue traducido tempranamente al siríaco. La Vulgata posterior no incluyó 4 Macabeos, pero Erasmo realizó una paráfrasis libre al latín (publicada por primera vez en 1524). No tenía acceso al texto griego, pero pudo haber trabajado desde una versión latina antigua.